Presente

Qué sensación, es el momento, ¿Qué momento? El momento en que te das cuenta de que la vida no es un cuento.
Qué sentimiento, es el momento, no cabe duda de que es real mi presentimiento.
Lo tengo dentro, es el momento clave de mi vida y ya lo he descubierto. Es la clave, es el enclave, este es mi punto de partida a partir del cual no pienso escuchar nada de lo que me digas.
Lo he encontrado, ha sido hoy mismo, he tenido que buscar en lo más profundo de mi abismo.
Es el fin del pesimismo, se trata de alpinismo, la escalada de la montaña más escarpada con el fin de encontrase a uno mismo.
Estoy en la cima, estoy bien arriba, es imposible que me bajes, solo aprecia mi autoestima.
Sí, este es el camino, me arrepiento de haber estado tanto tiempo sin haberlo conocido.
Larga espera, gran carrera sin una carretera que me guíe, que me indique, que me muestre una frontera.
Una frontera, eso es lo que necesitaba, vi la luz que me alumbraba y sin duda me lancé a ver de qué se trataba.
Y así lo he conseguido, sin castigo. Simplemente reflexión, es el único secreto amigo.
No te fíes, que nadie te guíe por su camino, crea el tuyo propio y que todos sean testigos.
Que se enteren, que no duerman, que despierten, que te eleven como mereces.
Y así, hoy comienzo mi camino, coloco el primer ladrillo, el primero de los muchos que me llevaran hasta mi lápida.
Por suerte ahora soy feliz, no creo en mi desliz, ya se cómo vivir.
Ya tengo un objetivo que me guíe, algo en que confíe, algo que no me prive, que me de lo que recibe.
Así que busca tu objetivo, es sencillo, tu primer propósito ha de ser permanecer vivo.

Que vengan

Pistola, bala, gatillo. Pistola, bala, gatillo. Pistola, bala, gatillo.
Qué fácil sería teniendo un arma, que, aunque parezca difícil de conseguir, no lo es, lo realmente difícil de obtener es el valor, algo que poca gente tiene y que todos deberíamos desear.
No creo que llegue a ser valiente nunca, pero si lo fuera lo haría, lo haría por todos aquellos que me hacen sufrir con sus aires de superioridad. Lo haría por aquellos que exigen que hagas cosas que ellos jamás serán capaces de hacer y tratan de hacerte ver que han tenido mala suerte en la vida, fracasados.
Lo haría por aquellos que no luchan por lo que quieren, si es que algo quieren, claro, ya que parece que su vida es un mero trámite hacia la muerte por un camino descendente.
Lo haría por todos aquellos que quieren venir a por mi por no ser como ellos, aquellos que van a por todos los sufridores en silencio, a por los únicos a los que se ven capacitados de vencer, hasta que algún día, estos despierten y al fin consigan vivir en paz. Lo haría por todos los hipócritas sin identidad, sin alma, sin nada, lo único realmente suyo es su nombre, ya que intentan ser alguien diferente delante de cada uno, aunque al final, lo perderán todo y a todos.
Pero sin duda alguna lo haría por todos aquellos que perecen a la sombra a los que no puedo aguantar ver resquebrajándose por dentro, destrozar su alma a base de duros tragos que jamás confesarán, no puedo verles así, pareciendo tipos débiles, aunque quieran aparentar ser duros, no puedo verles así, muriendo desde dentro.
Ellos son los que han de despertar y cambiar este mundo de injusticia, ellos, ellos... ellos son los únicos que pueden hacer esto, expulsar toda su rabia, su ira almacenada durante tantos años de vida. Ellos deberían mandar, y no los que lo hacen a base de mentiras y farsas, que por desgracia, mucha gente ve como el camino a seguir, todos esos perdidos a los que ya no dejan salir de ese camino cercado.
Solo hay que mirar atrás, ahí está la luz.
Como antes he dicho, mi deseo es ser valiente, marcar mi camino, es difícil, pero si realmente lo deseo, lo conseguiré. Entonces será cuando lo haré, lo haré por todos aquellos...GATILLO.

Y para aquellos que no lo acepten, que vengan entonces, que ya estaré listo y no podrán pararme, que vengan, que se den cuenta de lo que sufrieron los sufridores.